Apoyado en su hacha
Descansaba el trabajar
Miraba los callos
Que el mango supo sacar.
Cientos de árboles
Bajo su mano envejecida
No pudieron protestar
Al ser cortado al ras.
Viejo se sentía
Al ver maquinaria
Que hacía su trabajo
Sin parar.
Las ramas trozaban
Más rápido que su sierra
Que hacía años
Dejó de usar.
La vida se le escapaba
Como el bosque
Que debía cortar
Todos los días.
Cruel destino sufría
Impotente se sentía
Como los árboles
Que supo cortar.
Se internó en la espesura
Para no mirar atrás
Dejó su hacha tirada
Y de él no se supo más.