UN PERRO

Hoy fui a la plaza
Solo para torturarme
Viendo otras familias
Como la que quise tener.

Sueños rotos y perdidos
En la profundidad
De la obscuridad
Que me atrapa.

Intento y no puedo
No la puedo quitar
Es más fuerte
Que mis pocas fuerzas.

A pesar del frío
Padres e hijos
Disfrutando
Las calesitas.

Me senté a descansar
Y sentir el aire fresco
Para revivirme un poco
De tanta agonía.

Es difícil explicar
Con palabras
Lo que se siente
Solo el que sufre.

Puede comprender
La falta enorme
Que es no tener
A tu sangre al lado tuyo.

Cada día es una tortura
Que no tiene sentido ya
La cordura la dejé guardada
En un cajón solitario.

Para que le haga compañía
A mi corazón roto
Y el alma apenada
Bajo llave.

Entre tanta soledad y tristeza
Un perro vagabundo
Se acercó a mi banco
Buscando mimos.

Dos seres abandonados
Al destino que se forjaron
Coincidieron este día
Frío, muy frío.

Aunque sea verano
Igual se siente
La mordida atroz
De la helada en el cuerpo.

Las caricias que nos dimos
Duraron muy poco
Seguí mi camino
Y el quiso seguirme.

Con todo mi dolor a cuestas
Le dije que no
Hay mucho sufrimiento
Para que vivamos los dos.

Mordiéndome la mano
Cariñosamente me imploró
Que lo llevara conmigo
Y le diera amor.

Como decirle que no hay amor
Dentro mío
Que eso murió
Un año atrás.

Que solo vivo con mis recuerdos
Que atormentan mi vida
Y la de los que se acercan
Para ver quien soy.

Pero soy nadie
En quien puedan dejar
Un poco de cariño
Para revivir el corazón.

Intenté, lo juro que lo intenté
Pero solo me doy contra la pared
Esa que tiene miles de golpes
Marcada por el desamor.

Hoy salí a caminar
Y un pobre perro me siguió
Como decirle que es inútil
Porque muerto estoy.